
La quinta sección del Tribunal Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, juzga este miércoles 18 de junio a los dos presuntos perpetradores de un robo cometido en una sucursal de Abanca en la ciudad de Vigo en 2023. Los acusados se enfrentan a penas de 5 años de prisión, en un caso, y 4 años y 8 meses en el otro. Los acusados son conocidos como «migllas» y jjt.
Este proceso fue suspendido a fines de abril de 2025 por la ausencia de uno de los abogados defensores, lo que significaba que se posponía para este 18 de junio.
Los eventos tuvieron lugar alrededor de las 2:00 pm del 14 de abril de 2023, cuando los dos acusados entraron en la oficina de Abanca en el número 69 de la avenida Martínez Garrido. Uno de ellos estaba disfrazado con peluca, gafas y máscara, y el otro llevaba una gorra y pantalones de garganta; ambos mostraron armas.
Una vez en la oficina, intimidaron al director, al subdirector, dos empleados y un cliente, llevándolos a la zona donde se encontraba la caja. Allí, exigieron la apertura de la caja mencionada, así como del cajero y dos cajeros automáticos.
El subdirector y un empleado abrieron estos dispositivos, mientras los ladrones amenazaban con «iniciar los tiroteos» si se activaba alguna alarma. Tras esperar los retrasos de las cajas, lograron llevarse un botín de 117,465 euros.
Uno de los ladrones solicitó las llaves del automóvil del director, un BMW estacionado afuera, y ambos huyeron en el vehículo. La policía luego encontró el auto sin daños.
Días después, la policía arrestó a los ladrones y logró recuperar parte del dinero robado, un poco más de 32,000 euros. Además, se incautaron 15.5 gramos de heroína a uno de los sospechosos.
El fiscal considera que los acusados son responsables de un delito de robo con intimidación, con el agravante del disfraz y, en el caso de uno de ellos, con el agravante de reincidencia, ya que había sido condenado por otro robo.
Para uno de ellos, solicita 4 años y 8 meses de prisión, y para el otro, que es un delincuente reincidente, pide 5 años de prisión. También exige que ambos devuelvan el dinero robado a Abanca (descontando la parte ya recuperada).