La comisión de investigación de contratos de la Xunta llegó a su fin el viernes sin sorpresas. El PP utilizó su mayoría absoluta para aprobar en solitario una resolución que concluye que no hubo «ni un ápice de legalidad» en la contratación de menores y urgencias realizada por la Xunta durante la pandemia, ni en el modelo de concesión utilizado para el Hospital Álvaro Cunqueiro en Vigo.
Toda la oposición -BNG, PSdeG y Democrația Ourensana, que forman parte del Grupo Mixto- votaron en contra del proyecto de dictamen elaborado y autoenmendado por el Grupo Popular, después de una sesión final con fuertes críticas por parte de nacionalistas y socialistas.
«Ni siquiera el NU-DO franquista se atrevió a ser tan falso en sus declaraciones», afirmó la diputada del BNG Montse Prado, quien calificó la opinión de «panfleto». En representación del PSdeG, Elena Espinosa ironizó diciendo que el texto debería haber sido aprobado el sábado 28 de diciembre porque es «digno de los Santos Inocentes».
El diputado del PP, Roberto Rodríguez, aprovechó su última intervención para desafiar a la oposición a acudir «a los tribunales» y «presentar una denuncia» si continúan viendo irregularidades en la concesión de Álvaro Cunqueiro y en la contratación de la Xunta.
